Canon EF 70-300mm f/4-5.6 IS II USM

Con un útil rango de teleobjetivo, el objetivo EF 70-300mm f/4-5.6 IS II USM de Canon es un zoom flexible ideal para una gran variedad de sujetos, desde retratos hasta animales salvajes.

Igualmente, versátil, el objetivo utiliza la tecnología NANO USM que combina un motor ultrasónico de tipo anillo rápido y optimizado para imágenes fijas y un motor paso a paso suave y silencioso optimizado para vídeo para un rendimiento de enfoque completo en beneficio de los creadores de imágenes multimedia.

Este motor AF de doble propósito también ofrece un rendimiento notablemente más rápido en todo el rango de zoom para un disparo más sensible de cerca a lejos. Además, el sistema de estabilizador de la imagen, que también ayuda a la grabación de fotos y vídeos, compensa hasta cuatro paradas de movimiento de la cámara para obtener un disparo más nítido sin trípode cuando se trabaja con velocidades de obturación más lentas.

Canon EF 70-300mm f/4-5.6 IS II USM

• Montura EF/formato de fotograma completo
• Rango de apertura: f/4 a f/45
• Un elemento de dispersión ultra baja
• Sistema de enfoque automático NANO USM
• Hasta 4 pasos de estabilización de imagen
• Pantalla de información de la lente
• Enfoque manual a tiempo completo
• Diafragma redondeado de 9 hojas

Más allá de sus atributos de rendimiento, este lente también se caracteriza por su exclusiva pantalla de información de lente, que muestra claramente la distancia de enfoque, la distancia focal y los ajustes del estabilizador en una pantalla superior para un fácil reconocimiento.

En beneficio del rendimiento óptico, la construcción de la lente utiliza un elemento de dispersión ultra baja (UD) para controlar las aberraciones cromáticas y las franjas de color para mejorar la claridad y, además, se utiliza un diafragma de nueve hojas para producir una calidad bokeh agradable para imágenes de poca profundidad de campo.

Viajes

La fotografía de viajes no es solo para trotamundos; los recorridos turísticos, los días de relax y las miniparadas espontáneas también pueden ser recuerdos dignos de inmortalizar.